Guadalajara (México) 23 sep (EFE).- Militares mexicanos hallaron un laboratorio clandestino en el occidental estado de Jalisco y decomisaron 133 toneladas de precursores químicos, uno de las mayores incautaciones realizadas en el país, informaron hoy fuentes castrenses.
El laboratorio fue encontrado en un rancho de la comunidad El Durazno, en el municipio de Zapotlanejo, en un operativo realizado tras una denuncia anónima y en el que no se realizaron detenciones, dijo personal de la XV zona militar con sede en Jalisco.
Según las estimaciones castrens
es, la droga terminada tendría un costo de 430 millones de pesos (unos 31 millones de dólares) y equivaldría a tres millones 600 mil dosis.
Además de los precursores, los soldados decomisaron 25 toneladas de amoniaco clorhídrico, una tonelada de sosa cáustica, 180 kilos de cristal, dos camionetas y material diverso para la elaboración de droga sintética.
Entre el material hallado hay 418 tambos de diversas capacidades, además de botes térmicos, calderas e instrumentos de laboratorio.
En el rancho también había espacios acondicionados como dormitorios, por lo que se presume que entre 20 y 30 personas trabajaban allí.
Este es uno de mayores decomisos de precursores químicos realizados en México. En 2010 la Armada se incautó de más de 200 toneladas de sustancias usadas para la fabricación de drogas sintéticas en Manzanillo, en el Pacífico mexicano, una cifra récord en el país.
El laboratorio fue encontrado en un rancho de la comunidad El Durazno, en el municipio de Zapotlanejo, en un operativo realizado tras una denuncia anónima y en el que no se realizaron detenciones, dijo personal de la XV zona militar con sede en Jalisco.
Según las estimaciones castrens
Además de los precursores, los soldados decomisaron 25 toneladas de amoniaco clorhídrico, una tonelada de sosa cáustica, 180 kilos de cristal, dos camionetas y material diverso para la elaboración de droga sintética.
Entre el material hallado hay 418 tambos de diversas capacidades, además de botes térmicos, calderas e instrumentos de laboratorio.
En el rancho también había espacios acondicionados como dormitorios, por lo que se presume que entre 20 y 30 personas trabajaban allí.
Este es uno de mayores decomisos de precursores químicos realizados en México. En 2010 la Armada se incautó de más de 200 toneladas de sustancias usadas para la fabricación de drogas sintéticas en Manzanillo, en el Pacífico mexicano, una cifra récord en el país.
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