
El tribunal correccional de Angulema, al oeste de Francia, fue el que dictó la condena al religioso mexicano, de conformidad con lo que pidió la fiscalía durante un proceso judicial celebrado el pasado 10 de enero.
La agresión ocurrió en 2009, cuando el menor, que entonces tenía 13 años, acusó al religioso de agredirlo sexualmente durante unos cursos de catecismo. El misionero negó los hechos durante el proceso.
Ahora, ya con la sentencia dictada, el padre de la víctima se congratuló con la condena y adelantó que le escribirá al obispo de Angulema para que “investigue” a la congregación San Juan, pues ésta puede estar solapando actos de pederastia de sus miembros.
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