El secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, culpó a las administraciones anteriores de la inacción y tolerancia al crimen, ya que permitieron el crecimiento y diversificación de delitos, como secuestro, extorsión y robo, hasta generar el debilitamiento de las instituciones.
En el blog de la Presidencia, dijo que los mexicanos han sido testigos de las graves consecuencias que tienen soluciones falsas como pactar o no enfrentar el crimen.
En un artículo titulado “El cuarto mito: la solución a la violencia está en pactar con los criminales”, el funcionario federal dijo que acordar con delincuentes sólo hace florecer la impunidad y no garantiza el fin de la violencia, sino que otorga licencia a narcotraficantes, secuestradores, extorsionadores, ladrones y traficantes de personas para dañar a la sociedad.
Subrayó que nadie que haya sido víctima de alguno de esos delitos estaría dispuesto a pactar con su agresor.
“Nadie que reconozca los retos que hoy vivimos en materia de seguridad, precisamente derivados de ese pasado, apoyaría la idea de la negociación criminal en búsqueda de una tranquilidad que simplemente sería ilusoria.”
Poiré señaló que el único pacto que debe existir es el de la sociedad y su gobierno, y recalcó que la reducción de la incidencia delictiva en localidades como Tijuana no se logró permitiendo a algunos delinquir mientras se castigaba a otros.
Esto “se ha conseguido combatiendo frontalmente la actividad criminal de manera coordinada y corresponsable, al tiempo que se renuevan las corporaciones policiales y se reconstruye el tejido social”, expresó.
En el blog de la Presidencia, dijo que los mexicanos han sido testigos de las graves consecuencias que tienen soluciones falsas como pactar o no enfrentar el crimen.
En un artículo titulado “El cuarto mito: la solución a la violencia está en pactar con los criminales”, el funcionario federal dijo que acordar con delincuentes sólo hace florecer la impunidad y no garantiza el fin de la violencia, sino que otorga licencia a narcotraficantes, secuestradores, extorsionadores, ladrones y traficantes de personas para dañar a la sociedad.
Subrayó que nadie que haya sido víctima de alguno de esos delitos estaría dispuesto a pactar con su agresor.
“Nadie que reconozca los retos que hoy vivimos en materia de seguridad, precisamente derivados de ese pasado, apoyaría la idea de la negociación criminal en búsqueda de una tranquilidad que simplemente sería ilusoria.”Poiré señaló que el único pacto que debe existir es el de la sociedad y su gobierno, y recalcó que la reducción de la incidencia delictiva en localidades como Tijuana no se logró permitiendo a algunos delinquir mientras se castigaba a otros.
Esto “se ha conseguido combatiendo frontalmente la actividad criminal de manera coordinada y corresponsable, al tiempo que se renuevan las corporaciones policiales y se reconstruye el tejido social”, expresó.
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