
La nave, denominada Estación Espacial Comercial (CSS), abrirá sus puertas en 2016, según anunció la empresa, que no ha dado aún precios estimados de la estada.
Para llegar hasta ahí, los visitantes tendrán que volar en cohetes como los Soyuz. Además de servir como hotel de turistas y científicos, la CSS podrá utilizarse en caso de emergencia como vehículo de socorro de la famosa base International Space Station (a 100 km), si ésta necesita una evacuación.
Sergey Kostenko, CEO de la empresa rusa, informó que la nave tendrá acceso a Internet y que los menús deberán ser elegidos por los pasajeros antes de la partida, para llevarlos luego deshidratados. No se podrá beber alcohol. Tampoco habrá duchas, de manera que los huéspedes deberán asearse con trapos especiales.
Pasar las vacaciones ahí no es precisamente una propuesta festiva. Pero la vista será
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