“Claro que sí tememos por nuestra integridad y si se sigue manejando en los medios tememos también por la integridad física de nuestras familias” Mario Mata.
TRIBUNA LIBRE
Por: Luis Camacho
La ola de violencia que sacude la región centro sur que ha esparcido miedo e incertidumbre entre la población, no esta exigua de la política, mas al contrario, parecen dos parasitos de la isma especie.
Tras declaraciones del secretario de Gobierno de Chihuahua, el Lic. Raymundo Romero, quien advirtió que “no se va a solapar a nadie cualquier alcalde que tenga relaciones con el narcotráfico se va a quedar ensartado” varias sillas presidenciales han sufrido una autentica y maléfica metamorfosis, convirtiéndolas en auténticos polvorines y botines políticos.
Aunque mal pensados dicen que las declaraciones del segundo a cargo en el estado son para cortarles las alas a algunos alcaldes que se presumen como posibles aspirantes a ocupar una curul en el congreso de Chihuahua, el primer salto ya lo dio el alcalde de Delicias, Mario Mata, quien este lunes admitió sentir miedo y señaló sentirse vulnerable ante la violencia, lo cual da que pensar que cosas se vayan a ver en Delicias, algo que no dice nada bueno, ni de la poicía de Delicias, ni de la seguridad que se presume en Chihuahua.
En Meoqui, la tierra del eterno verano, por lo caliente, se vuelve cada vez más inaccesible para los pacíficos los pelícanos que suelen adornar el vado. Uno de ellos, muerto a causa de una bala, más no para los eternos soñadores.
A pesar de la violencia que invade el místico territorio hay quienes se atreven a fantasear con posar las ancas en la silla que por ahora ocupa Salvador García, quien se encuentra entre la lista de los posibles aspirantes a diputados.
Entre los que quieren la silla del docente meoquense, se encuentra el farmacéutico Ismael Pérez Pavía y al que dogmatizan como el “nuevo” de Meoqui. Y hay que ver que “nuevo” es sinónimo de “diferente” y diferente no define si es peor o mejor sino que no es similar, entre otras cosas.
El “nuevo”, como le dicen a Mario Villagrán, es impulsado por un grupo también nuevo o diferente al de los “mal queridos” ex alcaldes de Meoqui, Villarreal y Cisneros.
Dicho personaje “trae con que ganar la elección presidencial”, aseguran quienes comprenden que una elección no se gana con otra cosa que con dinero.
En tanto Pérez Pavía, por desgracia esta ligado a José Luis Cisneros, quien aún no paga la publicidad contratada durante su última elección, pérdida por cierto.
Pitufos maliciosos tanto de Meoqui como de Delicias, señalan que "el cholo ya vendió a muy alto precio la derrota de su pupilo”, y fuertes afirmaciones de gente de peso en el PAN regional, apuntan hacia algo relacionado con dichas afirmaciones.
Claro esta que el ex alcalde y ex diputado meoquense nunca ha sido buen amuleto de nadie, pues parece que a todos sus apadrinados los manda derechito al sacrificio electoral, como si se tratara de una compensación política.
En Delicias el candidato a la presidencia más asertivo para el PRI, sería el homeópata Ricardo Orviz Blake o en su defecto, ya de plano lo que decida el dedo indice del gobernador Duarte.
El virtual candidato del PAN por la presidencia de Delicias, Jaime Beltrán del Río, no esta plenamente seguro de contender, en tanto no surja el nombre del candidato a diputado de su partido.
Rosales es para el PAN, Rolando o Polo harán la diferencia para contender en las urnas contra Aymé Sánchez, a quien César Duarte sostuvo en sus piernas hace algunos ayeres, cuando la potencial candidata era todo un angelito.
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