El secretario general de Gobierno, Raymundo Romero, admitió que existe una investigación sobre alcaldes de las regiones serranas y centro-sur del estado por nexos con el crimen organizado, e informó que ya se les advirtió a los presidentes municipales que “no vamos a solapar a nadie, cualquiera que tenga relaciones con el narcotráfico se va a quedar ensartado”.
Ayer por la mañana Romero se reunió con nueve presidentes municipales de la zona serrana y les hizo llegar el mensaje directo del gobernador César Duarte de que no tiene compromiso con nadie y si les comprueban relaciones con los grupos criminales tendrán que responder.
En el encuentro participaron los alcaldes de Morelos, Guadalupe y Calvo, Ocampo, Batopilas, Morelos, Balleza, Guachochi, Urique, Bocoyna y Moris.
A todos el secretario de gobierno les pidió además que de ahora en adelante, cada vez que dejen el territorio municipal para viajar a la capital del estado o al Distrito Federal a realizar algún tipo de gestión, den aviso a sus respectivos Cabildos y justifiquen sus salidas.
Explicó que eso “es necesario porque ahora hay una sociedad más informada, más crítica, que constantemente señala que los presidentes municipales abandonan el ‘changarro’ por cuestiones de seguridad, porque ellos no justifican sus ausencias, ahora que lo hagan, que haya claridad”.
Romero recalcó que no se puede generalizar y hablar de que todos los alcaldes de la región serrana tienen relaciones indebidas con los grupos criminales que dominan la producción y trasiego de drogas “muchos se juegan la vida en el cargo, son gente que vive allá, van y vienen solos a las comunidades”.
Fuentes de Gobierno del Estado y de la Fiscalía General, confirmaron que la PGR está llevando a cabo una investigación sobre directores de seguridad pública y presidentes municipales, tanto de extracción panista como del PRI, en regiones donde se han registrado enfrentamientos entre grupos del crimen organizados y crímenes de alto impacto, como el asesinato de cuatro maestras en la carretera Creel-Guachochi; el ataque al poblado de Guadalupe y Calvo, así como una serie de homicidios en el municipio de Balleza.
La investigación de las autoridades federales incluye a presidentes municipales de Rosales, Meoqui, Jiménez y Valle de Zaragoza.
El fiscal general, Carlos Manuel Salas, informó hace una semana, que hay una investigación sobre funcionarios de Balleza, incluido el alcalde, Ramón Jurado Bojórquez de filiación panista, a raíz de que su ex director de Seguridad Pública, Armando Sánchez Sánchez, fue detenido, acusado del homicidio de Juvencio Villalobos Holguín cuando estaba en funciones.
En su discurso ante militantes del PRI reunidos en el Consejo Político Estatal, el gobernador César Duarte, señaló que en algunas regiones del estado hay problemas de inseguridad, “que se resolverán de fondo”. Subrayó que a pesar de eso Chihuahua ha recuperado la paz y la tranquilidad, y los repuntes de violencia que ahora se tienen no pueden compararse con las que existían hace dos años, cuando recibió el Gobierno del Estado.
Ayer por la mañana Romero se reunió con nueve presidentes municipales de la zona serrana y les hizo llegar el mensaje directo del gobernador César Duarte de que no tiene compromiso con nadie y si les comprueban relaciones con los grupos criminales tendrán que responder.
En el encuentro participaron los alcaldes de Morelos, Guadalupe y Calvo, Ocampo, Batopilas, Morelos, Balleza, Guachochi, Urique, Bocoyna y Moris.
A todos el secretario de gobierno les pidió además que de ahora en adelante, cada vez que dejen el territorio municipal para viajar a la capital del estado o al Distrito Federal a realizar algún tipo de gestión, den aviso a sus respectivos Cabildos y justifiquen sus salidas.
Explicó que eso “es necesario porque ahora hay una sociedad más informada, más crítica, que constantemente señala que los presidentes municipales abandonan el ‘changarro’ por cuestiones de seguridad, porque ellos no justifican sus ausencias, ahora que lo hagan, que haya claridad”.
Romero recalcó que no se puede generalizar y hablar de que todos los alcaldes de la región serrana tienen relaciones indebidas con los grupos criminales que dominan la producción y trasiego de drogas “muchos se juegan la vida en el cargo, son gente que vive allá, van y vienen solos a las comunidades”.
Fuentes de Gobierno del Estado y de la Fiscalía General, confirmaron que la PGR está llevando a cabo una investigación sobre directores de seguridad pública y presidentes municipales, tanto de extracción panista como del PRI, en regiones donde se han registrado enfrentamientos entre grupos del crimen organizados y crímenes de alto impacto, como el asesinato de cuatro maestras en la carretera Creel-Guachochi; el ataque al poblado de Guadalupe y Calvo, así como una serie de homicidios en el municipio de Balleza.
La investigación de las autoridades federales incluye a presidentes municipales de Rosales, Meoqui, Jiménez y Valle de Zaragoza.
El fiscal general, Carlos Manuel Salas, informó hace una semana, que hay una investigación sobre funcionarios de Balleza, incluido el alcalde, Ramón Jurado Bojórquez de filiación panista, a raíz de que su ex director de Seguridad Pública, Armando Sánchez Sánchez, fue detenido, acusado del homicidio de Juvencio Villalobos Holguín cuando estaba en funciones.
En su discurso ante militantes del PRI reunidos en el Consejo Político Estatal, el gobernador César Duarte, señaló que en algunas regiones del estado hay problemas de inseguridad, “que se resolverán de fondo”. Subrayó que a pesar de eso Chihuahua ha recuperado la paz y la tranquilidad, y los repuntes de violencia que ahora se tienen no pueden compararse con las que existían hace dos años, cuando recibió el Gobierno del Estado.
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