Vuelven los cursos en Valencia para ser meretriz tras archivar una denuncia la Fiscalía por no ver delito
La agencia que ofrecía cursos de «prostitución profesional» en Valencia ha retomado su actividad después de que la Fiscalía cerrara el pasado mes de julio las diligencias de investigación penal abiertas a raíz de una denuncia presentada por la Abogacía de la Generalitat.
Los promotores de esta iniciativa vuelven a ofrecer esta particular 'diplomatura', que tiene una semana de duración a un precio de cien euros. Para ello, la empresa, que no se identifica en sus folletos, ha puesto en marcha una nueva campaña de captación de 'alumnas ' y 'alumnos'.
En la denuncia registrada en mayo por la Conselleria de Justicia y Bienestar Social de Valencia se solicitaba al Ministerio Público que se pronunciara sobre si esta actividad incurría en un delito de proxenetismo al prometer un trabajo de meretriz al término de estas clases.La Fiscalía archivó la investigación al considerar que no había indicios de delito, puesto que no quedaba probado que el curso se dirigiera a menores, promoviera la prostitución, supusiera una estafa o que existiera realmente una actividad a este respecto. Según se informa a través del contacto que figura en las tarjetas, el curso se impartirá durante una semana completa durante dos horas al día y con flexibilidad de horarios para los interesados.Libros de texto y prácticas En el programa se incluyen asignaturas teóricas y prácticas, como por ejemplo las posturas sexuales básicas y nociones del 'Kamasutra', además de un libro de texto y material, como diversos juegos sexuales y consoladores. Desde la agencia organizadora remiten a los aspirantes a 'profesionales' del sexo a un piso ubicado en el barrio valenciano de Ruzafa y aseguran que tienen que ser mayores de edad. «Podrán aprender qué deben hacer, cómo y dónde. Esta formación ni se obliga ni se sugiere, porque se tendrán que realizar cosas que no son agradables, aunque cada uno puede hacer con su cuerpo lo que quiera. El trabajo está asegurado y el dinero se conseguirá de forma rápida», según sostienen los promotores del curso.
La agencia que ofrecía cursos de «prostitución profesional» en Valencia ha retomado su actividad después de que la Fiscalía cerrara el pasado mes de julio las diligencias de investigación penal abiertas a raíz de una denuncia presentada por la Abogacía de la Generalitat.
Los promotores de esta iniciativa vuelven a ofrecer esta particular 'diplomatura', que tiene una semana de duración a un precio de cien euros. Para ello, la empresa, que no se identifica en sus folletos, ha puesto en marcha una nueva campaña de captación de 'alumnas ' y 'alumnos'.
Los promotores de esta iniciativa vuelven a ofrecer esta particular 'diplomatura', que tiene una semana de duración a un precio de cien euros. Para ello, la empresa, que no se identifica en sus folletos, ha puesto en marcha una nueva campaña de captación de 'alumnas ' y 'alumnos'.
En la denuncia registrada en mayo por la Conselleria de Justicia y Bienestar Social de Valencia se solicitaba al Ministerio Público que se pronunciara sobre si esta actividad incurría en un delito de proxenetismo al prometer un trabajo de meretriz al término de estas clases.
La Fiscalía archivó la investigación al considerar que no había indicios de delito, puesto que no quedaba probado que el curso se dirigiera a menores, promoviera la prostitución, supusiera una estafa o que existiera realmente una actividad a este respecto. Según se informa a través del contacto que figura en las tarjetas, el curso se impartirá durante una semana completa durante dos horas al día y con flexibilidad de horarios para los interesados.
Libros de texto y prácticas
En el programa se incluyen asignaturas teóricas y prácticas, como por ejemplo las posturas sexuales básicas y nociones del 'Kamasutra', además de un libro de texto y material, como diversos juegos sexuales y consoladores. Desde la agencia organizadora remiten a los aspirantes a 'profesionales' del sexo a un piso ubicado en el barrio valenciano de Ruzafa y aseguran que tienen que ser mayores de edad. «Podrán aprender qué deben hacer, cómo y dónde. Esta formación ni se obliga ni se sugiere, porque se tendrán que realizar cosas que no son agradables, aunque cada uno puede hacer con su cuerpo lo que quiera. El trabajo está asegurado y el dinero se conseguirá de forma rápida», según sostienen los promotores del curso.
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