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Tribuna de Chihuahua
Miércoles 5 de Septiembre 2012
Las expectativas de seguridad en Lázaro Cárdenas ya sobrepasan hasta la fe del sacerdote del pueblo.
La noche de ayer más de 400 disparos decenas de los cuales se impactaron en las instalaciones del COBACH y una paletaría, hicieron del silencio de la media noche, una macabra melodía cuya resonancia ahuyentó cualquier signo de vida en las calles de esta comunidad.
Fue poco después de las 23:30 horas del martes, la plaza del pueblo, centro de la comunidad, fue el escenario perfecto para que el pánico se extendiera mas allá de la carretera federal. En la escena, grupos contrarios del crimen organizado se liaron en una batalla a fuego cruzado mientras las autoridades con su ausencia hacían irrebatible su temor.
Las llamadas constantes al 060 no hicieron eco en la conciencia ni relajaron los nervios de los representantes de la ley que, ausentes, dejaron el control del pueblo a los delincuentes.
El pasado 30 de enero del año en curso, la iglesia del pueblo fue rafagueada mientras el cura oficiaba la misa dominical, en esa ocasión, el altar de cristo fue baleado rozando el caliz sagrado. Mientras en el exterior una cruz de piedra daba fe de lo que habia ocurrido al ser alcanzada por una bala calibre .50 mm “La bala se incrustó en el costado donde le fue clavada la lanza a Jesús al morir en la cruz” confirmó el sacerdote, víctima del terror.
La sospecha acalora a los guardias, nadie los ve, nadie los advierte, pero las miradas fuertes los denotan, mientras velan lo que no se ve.
Después de la balacera de la iglesia la capacidad de asombro ha disminuido, y el oído del residente parece haberse educado para distinguir la dirección de donde proviene sonido de las balas.
“Heridos o muertos no hubo” informaron hoy las autoridades. Mientras tanto las clases fueron suspendidas por temor a otro ataque durante el día. Es la garantía de seguridad que siente la población de un pueblo que se encuentra muy cerca de la capital, pero a infinita distancia de Dios.
Hoy es miércoles, y los pobladores de Lázaro Cárdenas vaticinan haya más ruido esta noche.
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