El sexo no tiene que ser de ninguna forma. El sexo es y se disfruta de mil formas. El sexo vainilla viene a presentarnos otra cara de las relaciones sexuales.
Aquí no vamos a juzgar a nadie. Sabemos que la sexualidad tiene tantas caras como parejas en el mundo, es decir, cada quien la vive diferente. Pero justamente ésa es la cuestión: si cada quien la disfruta como quiere, ¿por qué enfrascarnos en que ésta TIENE QUE SER forzosamente atrevida, intrépida, fuera de lo común?
¿Y si no?, ¿qué pasa cuando las parejas no piensan de esta forma? En palabras comunes: ¿si una pareja no sale de la posición del misionero, esto convierte su vida sexual en aburrida y monótona? No necesariamente.
¿Qué es el sexo vainilla?
Empecemos con lo básico, ¿cuál es el sabor de helado más común? Exactamente: vainilla. De ahí se deriva el nombre a esta práctica: sexo sin juegos previos (forepley), caricias, sin posiciones "extrañas", simplemente el coito en la tradicional posición del misionero.
Si buscas en la web esta terminología, la mayoría de los artículos están relacionados con cómo evitar caer en esta práctica, ya que la creencia popular es que "sexo vainilla" es igual a "sexo aburrido y monótono", pero no necesariamente. De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine, la cantidad de tiempo "adecuada" para que una relación sexual sea considerada satisfactoria es de 3 a 13 minutos, lo que nos deja ver que es sólo un tabú aquello de que necesitamos horas y horas de sexo salvaje para estar contentos con nuestra vida sexual.
Dentro de las opiniones encontradas, también hay expertos que defienden al sexo vainilla. Tal es el caso de la terapeuta Sue McGarvie, terapeuta sexual canadiense con más de 22 años de experiencia en el mundo de la sexualidad: "Hay una diferencia enorme entre el sexo vainilla y el sexo malo o mediocre. No debemos confundir ambos términos. El sexo vainilla puede ser espectacular si es íntimo y emotivo", asegura.
¿Cuál es tu sabor favorito?
La vainilla es el sabor básico de la sexualidad, sin embargo existe una gran gama de opciones (swingers, BDSM, etc) que, siempre y cuando se vivan con responsabilidad, pueden venir a encender el fuego en tu cama. Se trata de conocer a fondo todas las posibilidades, tirar abajo los tabús y elegir en pareja lo que más se acomode con nuestra forma de pensar y nuestras necesidades.
Aquí no vamos a juzgar a nadie. Sabemos que la sexualidad tiene tantas caras como parejas en el mundo, es decir, cada quien la vive diferente. Pero justamente ésa es la cuestión: si cada quien la disfruta como quiere, ¿por qué enfrascarnos en que ésta TIENE QUE SER forzosamente atrevida, intrépida, fuera de lo común?
¿Y si no?, ¿qué pasa cuando las parejas no piensan de esta forma? En palabras comunes: ¿si una pareja no sale de la posición del misionero, esto convierte su vida sexual en aburrida y monótona? No necesariamente.
¿Qué es el sexo vainilla?
Si buscas en la web esta terminología, la mayoría de los artículos están relacionados con cómo evitar caer en esta práctica, ya que la creencia popular es que "sexo vainilla" es igual a "sexo aburrido y monótono", pero no necesariamente. De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine, la cantidad de tiempo "adecuada" para que una relación sexual sea considerada satisfactoria es de 3 a 13 minutos, lo que nos deja ver que es sólo un tabú aquello de que necesitamos horas y horas de sexo salvaje para estar contentos con nuestra vida sexual.
Dentro de las opiniones encontradas, también hay expertos que defienden al sexo vainilla. Tal es el caso de la terapeuta Sue McGarvie, terapeuta sexual canadiense con más de 22 años de experiencia en el mundo de la sexualidad: "Hay una diferencia enorme entre el sexo vainilla y el sexo malo o mediocre. No debemos confundir ambos términos. El sexo vainilla puede ser espectacular si es íntimo y emotivo", asegura.
¿Cuál es tu sabor favorito?
La vainilla es el sabor básico de la sexualidad, sin embargo existe una gran gama de opciones (swingers, BDSM, etc) que, siempre y cuando se vivan con responsabilidad, pueden venir a encender el fuego en tu cama. Se trata de conocer a fondo todas las posibilidades, tirar abajo los tabús y elegir en pareja lo que más se acomode con nuestra forma de pensar y nuestras necesidades.
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