La Sedena abrió a los medios la realización de un Consejo de Guerra donde se juzgó y condenó a 4 años de prisión a un cabo oficinista.
Difunde Sedena juicios militares
En un caso que data desde 2006, se juzgó en el Campo Militar No. 1 a un cabo oficinista por posesión de armas y cartuchos.
La Secretaría de la Defensa Nacional abrió a los medios de comunicación un Consejo de Guerra que determinará la responsabilidad o inocencia de un cabo oficinista de la tienda Sedena en Santa Gertrudis, Chihuahua, acusado de posesión de armas de fuego y cartuchos.
El Consejo de Guerra se instaló en el Supremo Tribunal Militar, a un costado de la Prisión Militar, mismo que es presidido por el general de brigada Mariano Paulino Jiménez Mejía, con cuatro vocales, un juez, secretario de juzgado y un secretario.
El acusado salió de su jurisdicción en el estado de Chihuahua y se trasladó por ferrocarril a Los Mochis, Sinaloa.
La audiencia inició con la presentación del acusado, cuyo nombre se pidió a los medios de comunicación omitir, y su puesto era el de encargado de la tortillería de la tienda.
Durante la audiencia, el acusado relató que supuestamente recibió órdenes del capitán de Administración, Tomás Guzmán Díaz, para trasladar varias maletas en las que llevaba 7 mil 750 cartuchos de diversos calibres y una pistola 9 milímetros, todo ello oculto en cobijas.
"Yo obedecí una orden..." La versión del acusado, un cabo de 29 años, quien trabajaba en la tienda de Sedena en la base de San Gertrudis, Chihuahua, es que cumplió la orden de su superior, el capitán Tomás Guzmán Díaz, quien le pidió trasladar el equipaje y entregarlo a un mayor cuya identidad nunca le reveló. El cabo argumentó que no conocía el contenido de las maletas.
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