México, 2 may (PL) La Procuraduría General de Justicia del Estado de Guanajuato (PGJE) confirmó el arresto de 26 integrantes de la Dirección de Policía de la ciudad de Tarandacuao, sospechosos de estar vinculados al cártel de la Familia Michoacana.
Según reportan hoy medios locales, durante la operación realizada en las instalaciones de la Seguridad Pública municipal fueron detenidos 23 policías y tres civiles, los cuales están directamente relacionados con al menos tres ejecuciones y con la protección de los narcotraficantes.
De acuerdo con el periódico Excelsior, los detenidos refirieron que el director de la entidad les ordenó que cuando llegaran integrantes de la organización criminal a la sede de la Policía preventiva, podían resguardar las armas de fuego utilizadas para cometer delitos en el armero oficial, y después entregarlas sin ningún problema cuando iban a recogerlas.
La fuente subraya que los agentes no sólo secuestraban a quienes les indicaba La Familia Michoacana, sino también cobraban las extorsiones, en tanto se investiga la participación directa de ellos en algún asesinato, acción por la que percibían diferentes cantidades de dinero.
El procurador de Justicia, Carlos Zamarripa Aguirre, indicó que el director de la Policía de Tarandacuao se encuentra prófugo, mientras el alcalde Roberto Juan García también será investigado, al igual que las entidades policiales de los 46 municipios de Guanajuato.
La edición digital de Milenio informa que las pesquisas preliminares arrojaron que el director de Seguridad Pública en esa localidad, Jesús Cárdenas Gómez, antes de ocupar el cargo en 2008 ya formaba parte del grupo delictivo, al tiempo que las autoridades locales lo vinculan con Sergio Romero Godínez, "El Amarillo", uno de los principales operadores de La Familia Michoacana.
"Ocupó el cargo justo después de que su antecesor fuera amenazado por el grupo criminal La Familia de ser privado de la vida si no abandonaba su encomienda y dejaba ese lugar para que otra persona asumiera ese cargo, obligándolo a renunciar en el año 2008", precisó Zamarripa.
Entre los detenidos se encuentran el subdirector de la dependencia, Ángel Leyva Regalado, alias El Calaca, y varios comandantes, además de dos elementos adscritos a Protección Civil municipal y tres vendedores de droga, indica el periódico mexicano.
El procurador explicó que los policías informaban al grupo delictivo cualquier movimiento, en tanto el director "les encargaba vigilar las entradas y salidas del municipio para que en caso de que tuvieran a la vista unidades de otra corporación policial del estado, lo reportaran vía telefónica; para ello instaló un módulo móvil en la carretera a Acámbaro".
lac/npg
Según reportan hoy medios locales, durante la operación realizada en las instalaciones de la Seguridad Pública municipal fueron detenidos 23 policías y tres civiles, los cuales están directamente relacionados con al menos tres ejecuciones y con la protección de los narcotraficantes.
De acuerdo con el periódico Excelsior, los detenidos refirieron que el director de la entidad les ordenó que cuando llegaran integrantes de la organización criminal a la sede de la Policía preventiva, podían resguardar las armas de fuego utilizadas para cometer delitos en el armero oficial, y después entregarlas sin ningún problema cuando iban a recogerlas.
La fuente subraya que los agentes no sólo secuestraban a quienes les indicaba La Familia Michoacana, sino también cobraban las extorsiones, en tanto se investiga la participación directa de ellos en algún asesinato, acción por la que percibían diferentes cantidades de dinero.
El procurador de Justicia, Carlos Zamarripa Aguirre, indicó que el director de la Policía de Tarandacuao se encuentra prófugo, mientras el alcalde Roberto Juan García también será investigado, al igual que las entidades policiales de los 46 municipios de Guanajuato.
La edición digital de Milenio informa que las pesquisas preliminares arrojaron que el director de Seguridad Pública en esa localidad, Jesús Cárdenas Gómez, antes de ocupar el cargo en 2008 ya formaba parte del grupo delictivo, al tiempo que las autoridades locales lo vinculan con Sergio Romero Godínez, "El Amarillo", uno de los principales operadores de La Familia Michoacana.
"Ocupó el cargo justo después de que su antecesor fuera amenazado por el grupo criminal La Familia de ser privado de la vida si no abandonaba su encomienda y dejaba ese lugar para que otra persona asumiera ese cargo, obligándolo a renunciar en el año 2008", precisó Zamarripa.
Entre los detenidos se encuentran el subdirector de la dependencia, Ángel Leyva Regalado, alias El Calaca, y varios comandantes, además de dos elementos adscritos a Protección Civil municipal y tres vendedores de droga, indica el periódico mexicano.
El procurador explicó que los policías informaban al grupo delictivo cualquier movimiento, en tanto el director "les encargaba vigilar las entradas y salidas del municipio para que en caso de que tuvieran a la vista unidades de otra corporación policial del estado, lo reportaran vía telefónica; para ello instaló un módulo móvil en la carretera a Acámbaro".
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