Meoqui Chihuahua.-El sacerdote católico Felipe de Jesús Legarreta Castillo fue declarado culpable del delito de Lesiones, en su modalidad agravada, y podría recibir una sentencia de hasta cinco años de cárcel.
Se trata de Felipe de Jesús Legarreta Castillo, quien estaba acusado de golpear junto con otros dos hombres a una persona que había atropellado a la madre del sacerdote.
La represalia que tomaron Legarreta, su hermano y un tercero que los acompañaba fue tan brutal que dejaron incapacitado de por vida Juan Gabriel Tarango Ramírez, quien estuvo una semana en coma y a la fecha no puede hablar, ni caminar o alimentarse por si mismo.
El caso inició en la ciudad de Meoqui, situada a 70 kilómetros al sur de esta capital, en julio del 2009, cuando en estado de ebriedad Tarango atropelló a la señora María Castillo de Legarreta, madre del religioso.
Según se detalló durante el juicio que duró poco más de un año, el accidente fue sumamente aparatoso y la mujer quedó bajo la camioneta que la arrolló.
Los acusados estaban en el sitio y corrieron a ayudarla, sin embargo al verla tan lesionada perdieron el control, bajaron al conductor por la ventanilla y lo golpearon contra el pavimento para luego, ya tirado en el piso, patearlo en la cabeza y tórax.
El Padre Legarreta radicaba en aquel momento en Chicago,Illinois, donde era pastor de la Parroquia de Santa María, aunque se encontraba en Meoqui de vacaciones.
Un Tribunal Oral integrado por los jueces Bernardo Moreno, Jorge Rohana y Martha Patricia Porras determinaron que el cura y su hermano Noé son culpables del delito de Lesiones.
Mientras que el tercer acusado, Aldo González García, había llegado previamente a un acuerdo reparatorio con la víctima.
Durante una semana los jueces revisarán de nuevo el expediente, y luego les dictarán una condena, que de acuerdo al Código Penal del estado podría ser de entre tres y cinco años de cárcel.
Con información de El Universal
Se trata de Felipe de Jesús Legarreta Castillo, quien estaba acusado de golpear junto con otros dos hombres a una persona que había atropellado a la madre del sacerdote.
La represalia que tomaron Legarreta, su hermano y un tercero que los acompañaba fue tan brutal que dejaron incapacitado de por vida Juan Gabriel Tarango Ramírez, quien estuvo una semana en coma y a la fecha no puede hablar, ni caminar o alimentarse por si mismo.
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| Cara de Santo y Puños de Hierro |
Según se detalló durante el juicio que duró poco más de un año, el accidente fue sumamente aparatoso y la mujer quedó bajo la camioneta que la arrolló.
Los acusados estaban en el sitio y corrieron a ayudarla, sin embargo al verla tan lesionada perdieron el control, bajaron al conductor por la ventanilla y lo golpearon contra el pavimento para luego, ya tirado en el piso, patearlo en la cabeza y tórax.
El Padre Legarreta radicaba en aquel momento en Chicago,Illinois, donde era pastor de la Parroquia de Santa María, aunque se encontraba en Meoqui de vacaciones.
Un Tribunal Oral integrado por los jueces Bernardo Moreno, Jorge Rohana y Martha Patricia Porras determinaron que el cura y su hermano Noé son culpables del delito de Lesiones.
Mientras que el tercer acusado, Aldo González García, había llegado previamente a un acuerdo reparatorio con la víctima.
Durante una semana los jueces revisarán de nuevo el expediente, y luego les dictarán una condena, que de acuerdo al Código Penal del estado podría ser de entre tres y cinco años de cárcel.
Con información de El Universal
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