http://static.impre.com/images/11/02/20/253x190_164497.jpg¿Juay, juay? Esas palabras de habla inglesa malpronunciadas, ahora célebres del periodista mexicano Joaquín López Dóriga cuando entrevistó el martes 15 de febrero al actor Anthony Hopkins en su noticiero demostrando que no sabe hablar inglés, era lo mismo que yo quería preguntarle a Ricky Martin cuando lo vi desfilando por la alfombra roja de los Grammys luciendo como un rompecabezas mal armado. De la cintura para arriba lucía como un hombre de negocios con saco y corbata, de la cintura a los tobillos parecía astronauta con unos pantalones plateados, y en la parte de los pies me recordó a un adolescente rebelde con unos botines altos. Weird. ¿Sería que quería comunicarse con los extraterrestes? Y es que cualquiera al ver el huevo de Lady Gaga lo hubiera pensado, ¿no creen? Y es que la cantante debería de ser restaurantera. Primero salió como chuleta de carne para los MTV Music Video Awards, ahora para los Grammys de huevo. La próxima vez será una larga tira de tocino, que se le facilita por que esa figura ya la tiene, o quizás salga como un hashbrown. Ya hasta ganas de desayunar me están dando. Ah, y antes de cambiar de tema, les explico que lo que López Dóriga quiso decir, era why?, o sea ¿porqué?, para que vean que sí espiko el Inglish....
A la que de seguro no le ponen atención a lo que dice es a Ninel Conde. La popular dizque cantante y actriz, cuyo cuerpo aumenta en lugares claves para atraer la atención de los hombres, como el pecho, la retaguardia y los labios, casi como un puberto en esteroides, se cree la cantante del momento y para demostrarlo fue al show de El Gordo y La Flaca para agasajarse de nuevo con el conductor cubano que cada día se hace más se degenerado haciendo comentarios sobre mujeres curvilíneas y sin cerebro. Sugiero que a la otra le lleven a la encantadora y amigable Paquita la del Barrio, ese si sería un show de pesos pesados y de revelaciones ya que Paquita hasta el momento no ha mostrado su cuerpo en traje de baño.
¿Y qué onda con... Pablo Montero?
Ahora resulta que desde el primer momento que miró la foto de su rumorado hijo supo que era de él. ¿Y por qué le tomó seis años hacerse la prueba de ADN y reconocerlo? Descarado, sinvergüenza, mal padre. Tan solo con mirar una foto del pequeño, claro con los cachetes acostumbrados de su edad, es suficiente para darse cuenta de que hay grandes posibilidades de que este pobre angelito del señor podría ser hijo del polémico cantante. Qué pena por el niño que durante los primeros años de vida no tuvo a un padre a su lado; pero bueno, pensándolo bien, con padres como este charrito cantor, quizás haya sido mejor que el cachetón no supiera quien lo engendró.
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